FRASE DE LA SEMANA

El Profesor Falsone acostumbraba colocar en su oficina, a la
vista de todos, encima de su escritorio, un cartelón donde escribía
de su mano y con letra grande de imprenta, lo que llamaba “La
frase de la semana”. Algunas de estas máximas las inventaba él
mismo, otras las extraía de algún libro, pero todas enaltecían la
grandeza de un ideal, la necesidad de superación y el cumplimiento
del deber. El Profesor Falsone tenía una cierta moral corneliana
donde el deber ocupa el primer puesto entre los valores humanos.
Estas frases tenían una gran fuerza moral, ya que el Profesor
Falsone las traducía en actos, mostrando así el ejemplo y trazando
el camino a seguir.
• No se juzga a un hombre por su origen o por sus títulos,
sino por lo que vale y por lo que hace.
• Sé lento en escoger a un amigo, y más en cambiarlo.
• Triste cosa es envejecer, pero es la única forma de vivir
mucho tiempo.
• Los copos de nieve son sumamente frágiles, pero hay que
ver lo que consiguen cuando se tienen.
• El peor castigo del culpable es que jamás será absuelto por
su propia conciencia.
• La única forma de resolver un problema es encararlo con
decisión.

La virtud del hombre no debe medirse por sus esfuerzos,
sino por la conducta de todos los días.
• Un hombre puede ser vencido, pero nunca derrotado.
• En el deporte, al contendor hay que vencerlo pero no
humillarlo.
• Haz una pregunta sin sentido y tendrás una respuesta con
sentido.
• El que dice lo que no debe, oye lo que no quiere.
• La humanidad avanza gracias no sólo a los fuertes
empujones de sus Héroes, sino también a los modestos
impulsos de cada hombre responsable.
• Ponerse bravo es echar a perder su inteligencia.
• Cuando se agota la suerte, es cuando se conoce lo que vale.
• El genio consiste en 1% de inspiración y 99% de
transpiración.
• Una persona no se mide por lo que tiene (talento, dinero,
amor etc...) sino por como usa lo que tiene.
• Educación y cultura es lo que perdura cuando uno ha
olvidado lo que aprendió en la escuela.
• Condúcete siempre como si diez ojos te miraran y diez
manos te señalaran con el dedo.
• Ninguna consideración puede apartar al hombre de su deber.

• La ingratitud es el crimen más grande que los hombres
pueden atreverse a cometer.
• No se desprecia a todos los que tienen vicios, pero si
despreciamos a todos los que no tienen ninguna virtud.
• Si tú no eres problema, significa que formas parte de la
solución.
• El orgulloso se destruye a sí mismo.
• El hombre más pobre es él que no tiene ni un solo centavo,
sino él que no tiene ni un solo sueño.
• Dejarse vencer por el pesimismo es apagar la luz de la
esperanza.
• Un hombre de buen sentido es aquel que no se lamenta de
lo que le falta y se alegra de lo que le sobra.
• Madurez es la capacidad de realizar una obra sin tener
obligación de hacerla, llevar dinero sin gastarlo y soportar
una injusticia sin desear venganza.
• Servir y ser servido son dos pliegues de la misma vestidura.
• Haz el bien y no mires a quien.
• No es pobre quien, sin tener riqueza, se siente feliz.
• Se puede hacer muy poco con la fe, pero no se puede hacer
nada sin ella.
• Para que triunfe el mal, sólo hace falta que los buenos no
hagan nada.

• El deporte es un campo donde se aprende el respeto a sí
mismo, a la ley y al trabajo.
• El que habla siembra, el que escucha recoge.
• No descuides la opinión del que se queda callado.
• El hombre inteligente que se enorgullece de su inteligencia,
se parece al presidiario que se enorgullece de su amplia
celda.
• La verdadera amistad es como la salud, cuyo valor raramente
se conoce hasta que se pierde.
• Recuerda que si la naturaleza nos ha dado dos oídos y una
sola boca, es para enseñarnos que vale dos veces más oír
que hablar.
• La confianza en sí mismo es el primer secreto del éxito.
• Las grandes visiones surgen de pequeños sueños.
• El que no lucha, no llega. El que pierde confianza ahí se queda.
• Todos enseñamos a todos, todos aprendemos de todos.
• La reputación del hombre es como su sombra, que unas
veces le sigue y otras veces le precede, unas veces es más
larga que él y otra veces más corta.
• Más vale ser malo con la esperanza de ser bueno, que
bueno con el propósito de ser malo.
• Es cierto que la nueva escoba barre bien, pero... el viejo
cepillo conoce todos los rincones.

• Quien al llegar no produce placer, lo produce al marcharse.
• Las maldiciones son como las procesiones. Regresan al lugar
de donde partieron.
• Cada niño es el padre del hombre que lleva dentro.
• Es pérdida de tiempo hallar defectos sin sugerir el remedio.
• Es bueno llenarse la cabeza de conocimientos pero hay que
saber que hacer con las manos.
• El secreto de la felicidad no está en hacer siempre lo que se
quiere, sino querer lo que se hace.
• Ser libre hace al hombre feliz pero sólo la educación hace
al hombre libre.
• Vale más saber alguna cosa de todo, que todo de una sola
cosa.
• Si de noche lloras por el sol, las lagrimas te impedirán ver
las estrellas.
• Es mejor ganar un amigo que vencer a mil enemigos.
• Quien no comprende una mirada, tampoco comprenderá
una larga explicación.
• La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que
hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar.
• El que no espera vencer ya está vencido.
• Nada es tan peligroso como un buen consejo acompañado
de un mal ejemplo.

• En la prosperidad nuestros amigos nos conocen
En la adversidad nosotros conocemos a nuestros amigos.
• Quien cree que la educación es costosa, hará bien en probar
lo que cuesta la ignorancia.
• El éxito es apenas algo más que suerte envuelta en trabajo
arduo.
• El hombre necesita aproximadamente 5 años para aprender
a hablar y cincuenta para aprender a callarse.
• No hay más que dos clases de hombres: Los justos que se
creen pecadores
Y los pecadores que se creen justos.
• Se ha definido al buen maestro como aquel que se ha hecho
progresivamente innecesario.
• Lo importante en diplomacia no es escuchar lo que se dice
sino averiguar lo que se piensa.
• El que tiene amigo, es rico.
• Todo hombre tiene que tener un motivo para levantarse
en las mañanas.
• Si el saludo no va acompañado de una sonrisa, no es saludo
La sonrisa es el resplandor que ilumina las manos que se
cruzan.
• La belleza adora la virtud.
• El discípulo que no sobrepasa al maestro, lo defrauda.

• En media hora de juego, podemos descubrir mejor a una
persona que en un año de conversación.
• Ser feliz, bien obrar y vivir bien son una sola y misma cosa.
• Lo importante no es añadir años a su vida, sino vida a sus
años.
• Cuando una cosa sale mal, lo importante no es hablar de
quien es el culpable, sino de quien va poner remedio.
• Hay 4 cosas viejas que son buenas:
Leña vieja para encender
Viejos vinos para beber
Viejos libros para leer
Viejos amigos para conversar.
• Quien suele decir lo que piensa, que no espere oír solamente
lo que le gustaría oír.
• El que quiere en esta vida todas las cosas a gusto, tendrá
muchos disgustos en la vida.
• El joven que no llora es un salvaje y el anciano que no ríe
es un necio.
• Lo grande de tener clase es ser honesto.
• El retorno hace amar al adiós.
• Hay personas que saben perder el tiempo ellas solas y son
el azote de las personas ocupadas.
• El elogio es como el perfume, debe percibirse, no tragarse
• Un amigo es aquel que adivina cuando se tiene necesidad
de él.

• La desgracia de esta época es que los hombres en vez de
ser útiles, tratan de ser importantes y generalmente no lo
logran.
• Lo que al caballero lo hace ser caballero es:
Ser medido en el hablar
Largo en el dar
Sobrío en el comer
Honesto en el vivir
Tierno en el perdonar
Y animoso en el pelear.
• Para que un tonto acierte, tiene que equivocarse.
• Se alcanza el éxito, convirtiendo cada paso en una meta y
cada meta en un paso.
• Cada ocasión desaprovechada en la juventud es una
probabilidad de desgracia para el futuro.
• El buen dirigente debe ser capaz de predecir lo que va a
pasar mañana, el mes próximo y el año que viene y explicar
después porque no ocurrió.
• Las pequeñas cosas de la vida son como los eslabones de
una cadena, solas no parecen tener importancia.
• Nadie sabe de lo que es capaz hasta que lo intenta.
• Se exige de acuerdo a la medida de lo que se da.
• Recuerda: no siempre vence el más fuerte, ni
invariablemente el más veloz gana la carrera, ni todo el
tiempo triunfa el mejor equipo. Lo logra quien lo desea de
veras.

• Es más fácil dar consejos que recibirlos.
• El mejor medio de salir bien de una discusión, es evitarla.
• La amistad es como una gota de mercurio; hay que mantener
la mano abierta para conservarla; si la cerramos, se nos
escapa.
• El hombre superior es modesto en el hablar, pero abundante
en el obrar.
• La única manera de poseer un amigo es serlo.
• Es necesario dejar una huella como testimonio de que se
pasó por este mundo.
• Triunfar o vencer puede no estar en nuestras manos, luchar si.
• No hay hombre más desdichado que él que nunca conoció
la adversidad
• El hombre es como la juventud, una vez que se pierde no
se recupera.
• Quien promete con mucha ligereza, se arrepiente despacio.
• El bien que los hombres hacen, vive después de su muerte.
• El éxito es como ir camino a casa. Si nos detenemos o
damos marcha atrás, nunca llegaremos.
• La ley es para los hombres, no los hombres para la ley.
• No creas que deja uno de reír al envejecer
Pero es cierto que uno envejece cuando deja de reír.


Ramón FALSONE